jueves, 28 de febrero de 2013

#operaciónlorza - Sopa de tomate al tomillo y hamburguesas de pollo

Ingredientes*:
A la rica sopa!

600ml de caldo vegetal o de pollo (en este caso, y como no tenía caldo congelado, tiré de despensa y utilicé el caldo de pollo de Knorr, que es el que tengo**)
3 tomates grandes muy maduros
1 zanahoria
1/2 cebolla
2-3 tiras de tomates secos en aceite
1 diente de ajo grande
1-2 ramitas de tomillo fresco (en mi caso utilicé un par de ramitas de tomillo seco)
3 cucharadas soperas de aceite de oliva
4 cucharadas soperas de leche evaporada
Sal y pimienta

1 hamburguesa de pollo preparada en casa
2 lonchas de queso de cabra 
Vegetales varios
Un poco de mayonesa light
2 rebanadas pequeñas de pan moreno

Preparación: 

- Poner agua a calentar en un cazo pequeño.

- Rallar la zanahoria no muy fina y picar bien la cebolla. En una olla de tamaño medio, calentar el aceite y sofreírlas, junto con el tomillo, a fuego medio hasta que la cebolla esté tierna y transparente (serán unos 15 minutos). Un poco antes, añadir el ajo cortado a láminas finas.

- Practicar un corte en forma de cruz en la base de los tomates, escaldarlos uno a uno. Al sacarlos (y dejando que se templen un poco), podrás pelarlos con toda facilidad. Picarlos a trozos grandes, junto con los tomates secos, y añadirlos al sofrito.

- Adicionar el caldo y, a fuego medio,  llevar a ebullición durante unos 5 minutos o hasta que el tomate esté hecho. Triturar todo con la batidora y si quieres, pasar luego por el chino. Añadir la crema evaporada y salpimentar al gusto**.

- Para las hamburguesas, tostar el pan, hacer la hamburguesa y prepararlas como si fuesen montaditos: un poco de mayonesa light en la base, una hoja de espinaca, unas tiras de cebolla, el queso, la hamburguesa y una rodajita de tomate seco. 

De postre: una naranja


NOTA: que no os asuste la receta, es muy fácil de preparar y el resultado es realmente espectacular! 

*La receta de la sopa la saqué del libro "Qué cocinar y cómo cocinarlo" de Jane Hornby.  
**Si has utilizado caldo ya preparado, ten en cuenta que ya llevan sal, por lo que no necesitarás añadirle más. 

martes, 26 de febrero de 2013

#operaciónlorza - Fideos con salmón, verduras y soja

Ingredientes:
A la rica pasta!

40 g de espaguetis o fideos orientales
1 lomo de salmón
1 pimiento verde
2-3 champiñones
1/4 cebolla
1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
1 cucharada sopera de salsa de soja
1 cucharadita de postre de aceite de sésamo
1 cucharadita de postre de semillas de sésamo



Preparación:

Hervir los espaguetis o fideos siguiendo las instrucciones del fabricante.
Lavar y sacar las semillas al pimiento. Cortarlo en trozos irregulares con las manos.
Lavar los champiñones y cortarlos a cuartos. 
Cortar la cebolla a trozos grandes y el salmón a tacos.
En un wok (o sartén en su defecto) poner el aceite de oliva y saltear el pimiento y la cebolla. Añadir el salmón a tacos y cuando empiecen a hacerse, añadir los fideos bien escurridos. 
Terminar la cocción añadiendo la salsa de soja y el aceite de sésamo. 
Emplatar y decorar con unas semillas de sésamo. Que aproveche! 

viernes, 22 de febrero de 2013

Tesoros mediterráneos – Coca de trampó



Coca de trampó
Aunque estemos bajo la amenaza de una ola de frío polar, una es tozuda como una mula y aquí viene llevando la contraria con recetas fuera de temporada. Y es que hacía tanto tiempo que tenía ganas de coca de trampó, que no he podido soportar la quemazón gustativa y he sucumbido ante la fascinación que siento por esta receta. El trampó es una ensalada mallorquina de verano que sabe a sol, a paseos por la playa, a ágapes campestres y a cielo azul. Tiene tres únicos ingredientes como tres soles: tomate, pimiento verde y cebolla, todos ellos vestidos con un generoso traje de aceite de oliva y alegrados con una pizca de sal y pimentón. El pimiento que se utiliza es el mallorquín, de un color más claro que el italiano, y que al parecer también se encuentra en Girona con el nombre de “bitxo”, así como en Hungría y países balcánicos. 

Podría decirse que la coca de trampó es la versión cocida de esta ensalada, una masa de pan sobre la que descansan las verduras cortadas y aliñadas. A partir de aquí, las variaciones pueden ser infinitas: los hay que añaden berenjena, en una especie de “samfaina”, tal y como se hace en algunas zonas de Cataluña la deliciosa coca de recapte, o pimientos como hacen en Menorca. Este tipo de cocas saladas también existen en el resto del Mediterráneo: desde las archiconocidas pizzas y focaccias italianas, pasando por las pitas calabresas, la pissaladière de la Provenza, el lahmakum armenio o el ajeen de Oriente Medio. Incluso en la misma isla podemos encontrar deliciosas variantes, como la coca de pimientos (rojos) y la de verduras. Pero lo que es verdad es una cosa: y es que la coca de trampó, fina, crujiente y jugosa, es única y exclusiva de la isla de Mallorca. Leyendo algunos libros de cocina mallorquina, veo con asombro que se le pone ajo y perejil. Jamás he visto y mucho menos probado la coca de trampó así. Ni la de mi madre, ni la de las madres de mis amigos, ni en las panaderías... jamás de los jamases. De hecho, he preguntado a mis amigos mallorquines y tampoco... Ni idea de dónde sale y si alguien lo sabe, agradeceré que lo diga en los comentarios. Sea como sea, la receta que os traigo hoy es la que conozco de toda la vida, la de la masa de pan, ligerita y crujiente, y sus verduras bien cortadas y aliñadas. Se come tibia o fría, de las dos formas está deliciosa, y es un estupendo aperitivo, una merienda exquisita o un tentempié la mar de oportuno.

Trampó veraniego
Mi sugerencia para disfrutar de este manjar es el temazo de los Pixies, Isla de Encanta, que no puede dejar de recordarme a los veranos y a aquel festivalazo llamado Isladencanta que pasó sin pena ni gloria por la isla, pero disfrutamos al máximo a pesar de la controversia creó. Enjoy!

Hermanita ven conmigo,
hermanita ven conmigo,
hay aviones cada hora... 




Coca de trampó

Cómeme
Ingredientes para un molde de 38 x 26 cm:

  • 260 g de harina floja.
  • 1 sobre de levadura deshidratada
  • 150 ml de agua
  • 75 ml de aceite de oliva
  • 4 tomates de pera grandes
  • 2 pimientos verdes grandes
  • 1 cebolla mediana
  • Sal y pimentón dulce.


Preparación:

  • Hacemos la masa poniendo en un bol grande el agua (tibia) y el aceite. En otro recipiente más pequeño ponemos la harina y la levadura en polvo, mezcladas.
  • Añadir poco a poco la harina en el bol grande, mezclando con las manos y formando una pasta hasta que adquiera la consistencia de masa y se despegue de las manos. Dejarla reposar tapada una hora, de forma que aumente de volumen.
  • Lavar los tomates y los pimientos, quitarles los tallos y las semillas a los pimientos. Cortar en dados de un centímetro por un centímetro, más o menos. Pelar y cortar la cebolla de igual manera.
  • Colocar toda la verdura cortada en un bol y aliñar con aceite de oliva virgen extra, sal y pimentón dulce al gusto (yo utilicé pimentón de La Vera)
  • Cuando la masa haya reposado el tiempo necesario, volver a amasar y estirar con el rodillo en una superficie limpia. 
  • Colocar la masa en el molde, estirándola bien ahora con los dedos y ajustándola bien a los bordes. Poner encima de la masa la mezcla de tomate, pimiento y cebolla en introducir la bandeja en el horno precalentado a 180ºC y cocerla hasta que esté hecha. Tardará unos 30 minutos, pero según el grosor puede necesitar 5-10 minutos más.
  • Una vez cocida, cortar en porciones y disfrutar tibia o fría.

lunes, 18 de febrero de 2013

Cuquin Magazine III


Hay que ver... aún no ha pasado ni medio año y ya llevamos tres números de Cuquin! Y es que cuando las cosas se hacen con cariño y pasión, salen solas. Este número viene cargado de ricas recetas invernales y grandes ideas para dar paso a la primavera y cocinar con fresas, que ya empiezan a visitar las tiendas. Para los panarras, traemos un genial artículo escrito por Andrés de “El Amasadero” en el que cuenta todo, todo y todo sobre las harinas. También tenemos a Sandra Mangas a.k.a SandeeA, de La Receta de la Felicidad, que es entrevistada por mi tocaya Raquel Carmona y quien nos regala una de sus maravillosas recetas. Todo esto y mucho más en este tercer número! Ah! Y claro, no os perdáis tampoco mi colaboración: alcachofas rellenas de sobrasada y queso mahonés, y un delicioso puding para las meriendas invernales. Buscad, buscad, y decidme qué os parecen!! :D 
Disfrutad de la lectura! ;)


Cuquin Magazine - Food & Photography III


viernes, 15 de febrero de 2013

#operaciónlorza - Tomate relleno de quinoa y ensalada

Ingredientes:
Tomate relleno de todo y más

1 tomate maduro
1 puñadito de quinoa
1 huevo hervido
1 lomo de bonito en aceite bien escurrido (o 1 lata de atún)
Las hortalizas que tengas en la nevera: escarola (2 hojas), aguacate (1/4), champiñones (1-2), cebolla (1 cucharada sopera picada), zanahoria (1 cucharada sopera picada)...
Un chorrito de zumo de limón
1,5 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
Sal

Preparación:

Poner agua a hervir y añadir la quinoa, enjuagada previamente con agua del grifo.
Cortar la parte superior del tomate, para quitar el tallo, como si quitásemos una tapa. Vaciar el tomate con la ayuda de un cuchillo y una cuchara pequeña.
Lavar las hortalizas, picarlas y ponerlas en un bol añadiendo la pulpa de tomate, la quinoa bien escurrida y el huevo picado. Aliñar con el zumo de limón, media cucharada de aceite de oliva y sal. 
En el plato donde vayas a servir el tomate, poner la escarola y los champiñones en la base del plato, junto con el bonito
Rellenar el tomate y colocarlo en el plato donde lo vayas a comer. Aliñar con el resto de aceite y que aproveche!

De postre, nada como una manzana cortada a tacos y mezclada con yogur natural desnatado. 

lunes, 11 de febrero de 2013

Los viejos rockeros nunca mueren: Jethro Tull in concert – Thick as a Brick

Comentaba hace poco durante una comida que el primer recuerdo musical que tengo es el del tocadiscos que tenían mis padres, junto con mi colección de vinilos infantiles. Aprendí muy temprano a manejar esa especie de gramófono que tan alucinada me tenía por su capacidad de sacar música de esas cosas redondas y negras llenas de surcos. Aquellos discos de Enrique y Ana, Parchís o la banda sonora de Marco siguen aún en mi poder, y espero que sea por los siglos de los siglos, que les tengo mucho cariño y aunque haga mil años que no los pongo, a veces me gusta sacarlos de su escondite y admirarlos recordando sus canciones. A partir de ahí he pasado por diversos momentos musicales (sí, yo también fui fans de los Hombres G... ¬¬'), hasta que una empezó le etapa del instituto, comenzaron los 90 y llegó el grunge. Y claro empecé a seguir el hilo musical hacia atrás en el tiempo, llegando a los 50', 60' y 70'. Y allí me quedé por mucho tiempo, no sin olvidarme de todo el sonido que venía de Seattle y alrededores, claro.

En el centro y en primer plano: la flauta de Ian

Bien, todo este rollazo viene para decir que Jethro Tull es de esos grupos que pasaron por mis adorados años noventa. Y es que era uno de los grupos preferidos de Helen, la dueña y camarera del desaparecido bar Rustic (algún día hablaré de ese gran bar), quien nos contaba que ella era del mismo pueblo que uno de los miembros del grupo, aunque tengo que confesar que no recuerdo de quién. La cuestión es que en aquel bar de melenudos además de ponernos The Doors, Janis Joplin, Creedence, Jimi Hendrix o Led Zeppelin, también sonaba Jethro Tull.

Ian Anderson
Jethro Tull es una de las bandas de rock más antiguas que quedan en activo. Su estilo musical se enmarca en el rock progresivo, un tipo de rock que surgió como evolución de la psicodelia y que se caracteriza por pasar de melodías acústicas y folk a otras más aceleradas, eléctricas y rítmicas, con tintes de rock, blues y jazz, sostenidas en el tiempo. Aunque de la formación original sólo queda Ian Anderson, líder y responsable de esos sonidos de viento creados por su magnífica flauta, la actual banda es capaz de poner en el escenario toda la esencia y clase musical que tenían en los 70. Tienen en el mercado más de 30 discos desde que sacaran el primero en 1968, y Thick as a brick, el disco que nos vinieron a tocar, es el quinto LP de la banda. Se trata de una suerte de mezcla de rock y música medieval, siendo ésta la primera vez que lo tocaban de nuevo en directo, desde 1972. El disco está formado por una única canción de 45 minutos, considerándose como el álbum definitivo de rock progresivo del grupo, el cual nos han traído al escenario en forma teatral y con nuevos músicos. Y como debe ser, este disco tiene también su historia: resulta que Ian es un cachondo y se inventó que las letras las había escrito un niño de ocho años llamado Gerald Bostock (ahora, hasta le han hecho una cuenta de twitter al muchacho!). Según la web oficial del grupo, Ian aún recibe preguntas sobre el destino del supuesto niño.

Bien, pasemos al concierto que tuvo lugar en el Palau de la Música Catalana de Barcelona. El primer momentazo de la noche fue llegar a unas puertas del Palau colapsadas por una masa de personas emocionadas y ligeramente alteradas por lo que esa noche iba a pasar ahí dentro. Me encantó ver a señores y señoras que ya peinaban canas (algunos ni eso ya), acompañados de sus hijos treintañeros y cuarentones, dispuestos a compartir con sus padres una experiencia musical excepcional. Algo muy parecido a lo que vimos en el concierto de los Rolling Stones en Barcelona el verano del 98. Una vez dentro, la sala hasta arriba, ni un asiento libre y una emoción en el ambiente que era capaz de respirarse y contagiar al más profano en el universo tulliano.


Thick as a Brick
Mientras suena el ding-dong-ding que avisa de los pocos minutos que quedan para que  empiece el espectáculo, un grupo de trabajadores sale al escenario a colocar los instrumentos, hacer algunas pruebas. El público sigue a los suyo, hablando, regresando del baño o buscando sus asientos. Mientras tanto los trabajadores sobre el escenario empiezan a comportarse de forma extraña, hablando entre ellos y haciendo aspavientos mientras el público se da cuenta de que algo raro pasa en el escenario y tachán!! Pero si son ellos!!!! Se quitan las batas de trabajo, se van a sus instrumentos y empiezan a tocar. Acto seguido aparece Anderson en el escenario y la ovación es masiva, espectacular, pone los pelos de punta y empieza a sonar Thick as a Brick. Así fue la noche, un continuo de buena música, de baterías, guitarras, voces y, como no, flautas cruzando océanos de tiempo. Una noche en la que vimos a Ian danzando por el escenario con su flauta, cantando con Ryan O'Donell, el muchacho que le hace las veces de voz secundaria y se mueve y baila como si fuera el bufón de la corte. Una noche con sorpresas como cuando el espectáculo es interrumpido por el sonido de un teléfono y Ryan le pasa un móvil a Ian quien, alegre y jovial, contesta a una tal Anna Phoebe, que resulta ser una virtuosa violinista que ha acompañado a la banda en algunos conciertos, y a quien tras saludar, le dice que “está en medio de un concierto y que se conecte en un par de minutos”. Y así, mientras la música continúa aparece en la pantalla una llamada de skype que nos muestra a Phoebe, quien se une a tocar el violín con la banda. 
Anna Phoebe
Así continuó la noche, hasta el infinito y más allá, con Ian y su flauta, Ryan cantarín y danzarín por el escenario, Mr. Goodier elegante con su bajo, Scott dándole a la batería, O'Hara al piano y Florian con su guitarra eléctrica... Y ves que ellos están disfrutando y pasándoselo pipa. Y tú y el público más, claro. Desde luego una experiencia para guardar en la memoria musical. 
Ian el Grande

Y aquí os dejo los casi 45 minutos que dura Thick as a Brick, enjoy!

Really don't mind if you sit this one out
My words but a whisper -- your deafness a SHOUT...



martes, 5 de febrero de 2013

#operaciónlorza - Atún a la plancha con ensalada enrollada

Ingredientes:

1 filete de atún
2 obleas de arroz
Hortalizas variadas, de las que tengas en la nevera: lechuga, tomate, zanahoria, aguacate, champiñón crudo, cebolla...
Zumo de 1/2 limón
Salsa de soja
AOVE
Sal

Preparación:

Picar bien todas las hortalizas y mezclarlas en un bol con el zumo de medio limón y una cucharada sopera de aceite de oliva

Calentar la sartén con media cucharada sopera de aceite de oliva y hacer el atún vuelta y vuelta

Hacer los rollitos siguiendo las instrucciones de la receta de rollitos de ensalada que ya publiqué en su día. Acompañar con salsa de soja.

Sugerencias: acompañar con un caldo calentito y de postre una manzana pequeña cortada a trozos pequeños con yogur.

domingo, 3 de febrero de 2013

Un año de amor – Rigatone con alcachofas y gambas


Ya queda poco para que la blogosfera se nos llene de nuevo con recetas sanvalentineras. Tengo que reconocer que el año pasado pequé de novata y caí víctima de las flechas de Cupido haciendo una receta para tal ocasión. Pero es que tendréis que disculparme, porque cuando una se enamora de verdad hace tonterías como las de publicar recetas con piruletas en forma de corazón. Y es que el año pasado inicié una relación amorosa con alguien muy especial, alguien con quien me he ido encontrado en las más diversas situaciones: desde microcalentones, hasta subidones de temperatura en toda regla, de esos que molan. Bien, pues tengo que decir que después de una año de amor, mi horno y yo hemos pasado grandes momentos como los anteriormente descritos, pero también situaciones penosas como la vez en la que se me olvidó que tenía unas lonchitas de bacon haciéndose para unas hamburguesas sin par. Adjunto documento gráfico para que quede constancia de lo que ocurrió. En cualquier caso, como en esto de las relaciones "amor con amor se paga", voy a entregarme de nuevo a sus brazos y a preparar una receta con y para él.

Desastre culinario: bacon chamuscado

Rigatone listo para dos
Se trata ni más ni menos de unos rigatone con alcachofas y gambas, ideales para relaciones a punto de hacer agua. O al menos eso dice su autora. La receta está sacada del libro La enciclopedia de los sabores, de Niki Segnit, y del que ya os hablé en otra entrada. Resulta que estaba ella de viaje por Italia con un noviete suyo cuando, tras una acalorada discusión que vaticinaba el peor destino para su relación, pararon a comer en un paraje encantador por el Lazio. Según cuenta, bajo la sombra de un olivo les sirvieron esto que veis a la derecha de vuestra pantalla, y que sirvió para que lo ánimos se calmasen. Para eso y para que tuviesen la mejor última cita de su vida, todo sea dicho de paso, con lo que no sé si deberíais preparar esta receta ante un inminente desastre amoroso. De todas formas, sea como sea, seguro que ayuda a que el desastre se perfile, cuanto menos, gustoso. La receta, tal y como la cuenta Niki en el libro, lleva panceta, pero ante la falta del ingrediente en mi nevera, eché mano de unas gambas rojas que tenía en el congelador. Así que vosotros mismos, donde dije gambas puedo decir también panceta.

Una historia de amor como ésta y con semejante plato en el menú, se merece la mejor canción de amor del mundo. Llevo un buen rato pensando y tras marear los archivos sonoros he vuelto a caer en The Wave Pictures, como el año pasado. Sí, ya... qué poco original, pero jopeta, es que ellos como nadie saben hacer canciones de amor que no resulten pastelosas y que encima, utilicen analogías con cosas ricas como una tarta de cerezas, helado o azúcar. Y además, que “eres la niña de mis ojos” en inglés se diga “you are the apple of my eyes” (literalmente, eres la manzana de mis ojos) mola mucho y así lo dicen ellos en esta canción: you are the apple of my eyes / my cherrie pie / my cake & ice cream / my sugar & spice & and all things nice (eres la niña de mis ojos / mi tarta de cerezas / mi pastel & helado / mi azúcar & pimienta & todas las cosas bonitas). Bueno, creo que sí, que es un pastelazo de letra que te mueres, pero son The Wave Pictures, oye!

You can leave me
you can go a million miles away...




Rigatone con alcachofas y gambas

Ingredientes para 2 personas:

  • Aunque no se vean, las gambas están, cortadas pequeñitas, pero están!
    160 g de rigatone
  • ½ cebolla picada
  • 2 dientes de ajo picados
  • 4-6 corazones de alcachofas (según la autora, si son buenas, las de tarro sirven)
  • 8-10 colas de gamba roja
  • 125 ml de leche evaporada
  • 125 ml de nata para cocinar
  • 1 bola de mozzarella
  • 75 g de parmesano rallado 
  • 30 g de pan rallado

Preparación:
  • Hervir las alcachofas. Vigila de vez en cuando la cocción y cuando veas que puedes quitar las hojas sin dificultad, retíralas del agua, escúrrelas y déjalas enfriar.
  • Eliminar las hojas de fuera de la alcachofa y quédate con el corazón. Con las hojas que quites, puedes preparar una mayonesa como ésta.
  • En una sartén grande pochar la cebolla y el ajo picado. Añadir las colas de gambas cortadas por la mitad y las alcachofas cortadas en cuartos o sextos. Añadir la pasta y remover bien.
  • Pasar la mezcla a una cazuela de barro para dos personas.
  • En un bol, mezclar la nata y la leche evaporada y añadir 50 g de parmesano. Verter la mezcla sobre la pasta.
  • Cortar la mozzarella en rodajas y cubrir la pasta con ella. Añadir el pan rallado y el parmesano restante por encima y hornear durante 30 minutos a 200ºC, calor arriba y abajo. Los últimos 10 minutos puedes subir la bandeja para que se termine de gratinar bien la superficie.
  • A disfrutar con una botella de vino blanco bien fresco!